¿Quién anda detrás del Upper East Side?

Spotted! La esencia de Gossip Girl, ese blog que capitanea la vida de los Upper East Siders, es narrado por una misteriosa chica que nunca muestra su apariencia. Varias veces se ha intentado desbancar al archiconocido blog, pero en el fondo es parte de la vida de los protagonistas y, aunque todos lo odian, en el fondo no saben vivir sin él.

La primera revuelta vino cuando Dan se ligó a la profe de literatura, excusa que le valió a la asociación de padres del Billard (lo sentimos, sonaría muy cutre decir “APA” en ese mundillo ricachón) para intentar aniquilar al blog. También Serena hizo un amago fallido de desenmascarar a la blogger fantasma por sí misma. No obstante, el último y más fuerte boicot fue tras el décimo capítulo, el del accidente de Blair y Chuck previo a Navidad. A la vuelta, nos sorprendieron con el primer episodio que no mencionaba al blog, ni siquiera había letras, ni canción… ¿dónde estaba Gossip Girl? Ella sola se las arregló para volver a hacerse fuerte, obviamente no se puede prescindir de ella. Últimamente se le han puesto nombre y apellidos – empieza por Geor… y termina por Sparks.

Claro está que es la que siempre nos mantiene en vilo, la que siembra la incertidumbre y el chismorreo, y por ello su voz debía estar perfectamente seleccionada. El director del show tuvo que pensarse muy mucho quién cuadraba para ello… y finalmente lo consiguió. Consiguió colar en nuestras cabezas ese tono tan misterioso e irónico que engancha y hasta obsesiona! Pero ¿quién es realmente Gossip Girl? Mientras no se nos muestre en la ficción, al menos podemos ponerle cara en la realidad: Kristen Bell. La actriz conocida por la serie Veronica Mars es la voz secreta narradora de la serie, la supuesta Gossip Girl que todo lo sabe y todo lo cuenta, aquella que firma cada capítulo con su “You know you love me. Xoxo, Gossip Girl”.

Lo curioso de esto es que han conseguido que millones de chicas de todo el mundo adopten esa breve firma como coletilla para mensajes, correos y notitas… y que tire la primera piedra quien no peque de ello.