Lo sé. Lo admito. Lo confieso: hoy me he sentido una Gossip girl… ¡y me ha encantado!
Si hay
algo que caracterice a GG, es la
importancia que le da a la moda y la cantidad de eventos relacionados que tiene.
Tan sólo hay que acordarse de que nuestra ex prota Jenny Humphrey era una aspirante
a diseñadora o que Eleanor Waldorf tenía una reconocida firma. ¿Y qué es lo más
importante que tenemos en España en cuanto a moda? ¡¡Cibeles!!
Ayer daba comienzo la MercedesBenz Fashion Week de la mano del gallego Roberto Verino, y hoy he tenido la
inmensa oportunidad de estar en el backstage
preparando el desfile de Roberto Torreta!!
La cita oficial era a las 15h, y a las 13h he llegado
enfundada en un vestidito negro, color corporativo de la marca en estos
eventos. La tranquilidad reinaba en el ambiente, cosa rara, hasta que, 15
minutos antes de la hora señalada, han llegado las 15 vestidoras (voluntarias estudiantes
de escuelas de moda) y las 15 modelos (todas extranjeras, menos una española)…
empezaba el revuelo.
Tras 10 minutos de flashes captadores de las risas de las modelos
que formaban fila al pie de la pasarela, los periodistas eran invitados a
retirarse detrás de unos cordeles para dar comienzo al show. En el momento en
el que me disponía a cruzar el ahora exclusivo territorio, vetado a las cámaras,
me he sentido cual Blair Waldorf y no he podido evitar que una sonrisa se asomara
en mis labios. Diligentemente, me he colocado al pie de la pasarela, por donde
salían las modelos, atenta a los cambios de bolsos que debía efectuar rápida y
velozmente entre la que llegaba y la que se iba. Era cómico contemplar cómo la
tranquilidad y seguridad con la que desfilaban se transformaban en prisas y
nerviosismo al torcer el panel que divide la pasarela del backstage.
Pero acabó. Acabó en 20 minutos para el público y en 5 para
nosotros, que todo nos parecía vertiginoso! Y tras el carrusel de despedida,
las modelos enfilaban el camino al box
emocionadas por el buen resultado, felicitando y dando las gracias con
admirable sencillez.
Fred Tutino, director creativo, y Roberto Torreta junto a dos de las modelos
Los aplausos, los besos y los abrazos colmaban a las 9 maravillosas personas que forman el equipo del diseñador argentino, entre los que se puede palpar una envidiable camaradería y un contagioso buen rollo. En cuestión de 10min (lo que hemos tardado en recogerlo todo), el cansancio de semanas de insomnio y duro trabajo empezaban a hacer mella en sus rostros. Y mañana vuelta al taller, pero eso sí, “con un buen desayuno de donuts de chocolate y pan con Nocilla”, decía Charo, una de las costureras. ¡Me apunto!
Que pasada y que envidia!!!!! un beso enorme! cada día me gusta más!
ResponderEliminarNada sin ti!
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